lunes, 23 de marzo de 2009

HUERFANA EN LA NIÑEZ

En unas tierra de Loja nací yo un buen día cuando el Sol no apuntaba ni la aurora todavía. En un día de verano mi padre a mi me dejo en mi primer cuarentón. Mi madre con tanta pena me cuidaba cada día y ahora debo la vida a Dios y ala madre mía. Como un capullo cerrado he crecido hasta llegar ala edad de las y luciones de sueños y realidad. Pero la vida ¡ Ay ! dolo que tan dulce fue hasta aquí fue cargado el rigor de sus males sobre mi que cual un al leta fuerte lucho a brazo partido venciendo cada vez mas con frenesí y sin tino.Para lograr mis deseos yo aun he de luchar y mas que nada lo demás. Mi familia ahora por bien vive con moralidad ¡ Ay ! si hubiese sido siempre así no tendría yo en que pensar. Tu Reina y Madre amorosa con mis ruegos y mis llantos concederme lo que te pido aunque si me cuesta tanto.Tu ya sabes que cuando ruego mi carácter voluntarioso no se separa de Ti tan alegre y luminoso hasta conseguir lo que pedí. De todas formas yo se que me lo has de otorgar y siempre me has de cobijar bajo tu manto maternal. Yo en cambio te prometo ser muy buena y obediente y cumplí del colegio el reglamento aunque muchas cosas me cuesta.

1 comentario:

  1. Mari hija, me as echo llorar, cuando he leido tu niñes. Yo tambien tengo historia si quisiera escribir, pero vamos avivir la vida que nos quede lo mas felicez que podamos chaooo

    ResponderEliminar